Pelajes diferentes requieren frotes diferentes: el peinado y el cepillado necesitan cambiarse de acuerdo con la longitud y el tipo del pelo. En términos generales, los perros de pelo corto se deben peinar una o dos veces más a la semana con un guante especial para esto. Los pelajes más largos necesitan cepillos de cerdas, de alambre o de cardar; los cachorros necesitan peines con dientes redondeados que no irriten la piel. Los perros de pelo largo se deben peinar antes del baño.
Los perros de pelaje largo con frecuencia tienen el pelo enredado (porque no se cepilla y se peina con frecuencia) detrás de las orejas y debajo de las patas. Hay que irlo separando con cuidado y peinarlo. Muchas clases de perros necesitan que se les corten y desenrrede el pelaje regularmente. Eso se puede hacer en la casa o buscar un peluquero profesional que sea cariñoso y tenga un establecimiento limpio y sin olores desagradables. Los vecinos y amigos pueden recomendar alguno.
Hay que empezar a cepillar y peinar a los animales desde temprana edad (más o menos a las doce semanas) y siempre tener mucha suavidad y paciencia; esto será una experiencia sana y agradable para uno y para el perro.
